Se llaman Centinelas de la Mañana, proceden de Italia y están dispuestos a cambiar el modelo de evangelización para adaptarlos a los nuevos tiempos. Adaptarse al mundo no significa hacerse mundanos y falsear o renunciar a nuestra fe.
No son la única manera de evangelizar, pero sí son una apuesta fuerte por utilizar los medios actuales, para llevar a los demás a una verdad eterna.
No son la única manera de evangelizar, pero sí son una apuesta fuerte por utilizar los medios actuales, para llevar a los demás a una verdad eterna.
En la página de Religión en Libertad encontramos una entrevista muy interesante con Andrea Brugnoli, su iniciador.
Nos cuenta que no son un movimiento, sino una manera de hacer las cosas. Que sus métodos se pueden adaptar a distintas realidades de la Iglesia ¿Por qué no a la nuestra?
Nos habla de estar dispuesto a salir a por el otro, pero también nos recuerda que debemos preparar los grupos para estar dispuestos a recibirlo. No se puede a un alejado, de primeras meterle solo en una misa, sin estar con él, acompañándolo, explicado los ritos, la grandeza de la eucaristía, etc.
Algunos fragmetos de la entrevista son:
"- ¿Cómo nació Centinelas de la Mañana?
- En 1997 yo trabajaba en la Santa Sede, pero me sentí llamado por Dios a evangelizar por las calles. Lo hablé con mi obispo, el de Verona, y me dio permiso.
- ¿Qué dimensiones tiene Centinelas de la Mañana hoy?
- Tiene presencia en 40 diócesis italianas, grandes y pequeñas, urbanas y rurales. Para empezar el proyecto solo se necesitan jóvenes que quieran evangelizar. Nuestra experiencia es que lo inician jóvenes laicos, de 20 a 35 años, y que los sacerdotes se apuntan después, cuando ven los frutos y la ilusión de los chicos.
- Hay quien dice que evangelizar no es cosa de métodos, que basta con el buen ejemplo personal y confiar en el Espíritu Santo.
- Si quieres ser un gran pianista necesitas tener una técnica perfeccionada y así serás libre para expresar luego tus sentimientos, los de la obra, etc... Con la evangelización pasa lo mismo: cuanta más técnica tengas, más puedes poner al servicio del Espíritu Santo. La técnica es buena: nos ayuda a dejar intervenir a Dios.
- ¿Hay que salir a las calles?
- Para evangelizar hay que trabajar dos cosas: el "in" y el "out", es decir, el salir afuera a anunciar el Evangelio y el saber acoger. No tiene sentido salir a la calle a dar kerigma si nuestro grupo o parroquia no está preparada para acoger y recibir a los nuevos conversos o personas que se interesan. Después de un primer anuncio de Cristo y el evangelio, puede ser que alguien alejado de la fe quiera acercarse a la Iglesia. Es alguien que ya ha tenido un encuentro con Dios, pero aún no con la Iglesia. Necesita que un evangelizador le acompañe, le apadrine.
- ¿Cómo resuelven esa acogida los Centinelas de la Mañana?
- Tenemos un método llamado "La barca", que es básicamente un grupo de jóvenes acogedores, de su edad y nivel, que reciben a estas personas que vienen de la calle, de la increencia, y que aún no puedes enviar directamente a misa o a Acción Católica o a la vida parroquial plena. Es gente que no conoce ni las canciones de misa, ni a los parroquianos, que no se sentiría acogida si va sola a misa. Se llama "La barca" porque Jesús no solo pescaba en barca: ¡también llevaba los peces a la orilla!
- ¿Hay que ser muy explícito, hablar de Jesús enseguida?
- Si en la Iglesia intentamos imitar al mundo, la gente, los jóvenes, no nos escucharán. Hemos de ser muy distintos del mundo, muy explícitos con Jesús. Cuando las personas ven que un joven les habla de Jesús se preguntan: ¿y éste, por qué cree? Y quizá empiezan a dialogar. Cuando nuestros chicos salen a la calle tienen miedo, claro, pero lo hacen por obediencia a Jesús, que lo pide. Pablo VI en Evangelium Nuntiandii ya decía que dar un buen testimonio de vida, sin anunciar explícitamente a Jesús, no es suficiente. El nombre de Jesús es eficaz.
- Los Centinelas usan también el método de "células de evangelización"...
- Sí, el método de las células tiene mucho éxito en todas las edades. Es un grupo pequeño de gente que evangeliza en su ambiente, suma más miembros invitando amigos y conocidos, y cuando ha crecido se divide creando otra célula. En Italia está extendiéndose bastante y nosotros lo usamos. Evangelizar es algo que debemos hacer todos, aunque no todos salgamos a la calle.
- ¿Centinelas es un movimiento?
- No. Jurídicamente somos solo un proyecto, un conjunto de métodos que funcionan y ofrecemos a todo el mundo. A mí nadie me llama fundador ni hay nadie citando mis frases ni comentando mis libros... Yo enseño el método, me voy y los jóvenes de ese grupo o diócesis lo hacen. No tenemos red ni estructura de movimiento. No tenemos una espiritualidad propia. El método lo conoce Benedicto XVI, porque el arzobispo Fisichella se lo explicó en persona."
La web de los Centinelas es: http://www.sentinelledelmattino.org/
0 comentarios:
Publicar un comentario